Tras haber
analizado en dos de las entradas anteriores ciertos aspectos de la interacción
entre la tutela civil y la tutela pública (administrativa) en materia de prácticas
restrictivas de la competencia (aquí) y de protección de datos personales (aquí), cabe reseñar que la sentencia
del TEDH de 19 de enero de 2023 en el asunto Korotyuk c. Ucrania (Application
no. 74663/17), presenta interés desde la perspectiva de
la interacción entre la tutela civil y la tutela pública -en este caso, penal- de
la propiedad intelectual, en relación con actos de infracción cometidos a
través de Internet. En concreto, la sentencia tiene su origen en una denuncia interpuesta
por la autora de un libro jurídico ucraniano que sin su consentimiento había
sido puesto a disposición del público para su descarga ilícita previo pago en
un sitio web dedicado principalmente a compartir libros de texto ucranianos. La
demanda ante el TEDH tenía su fundamento en el incumplimiento por el Estado
demandado de sus obligaciones positivas, en virtud
del artículo 1 del Protocolo nº 1 del Convenio
Europeo de Derechos Humanos, de proteger la propiedad intelectual, al no haber
llevado a cabo una investigación rápida y efectiva con respecto a esa denuncia,
en circunstancias en las que la autora carecía de un recurso civil eficaz para
tutelar sus derechos de autor.