Ciertamente, habida cuenta del desarrollo de la armonización europea en este ámbito la nueva ley se limita prácticamente a reproducir el contenido de la Directiva 2009/110/CE (Derecho privado de Internet, 4ª ed, 2011, pp. 892-898). Esta orientación de la Ley no debe extrañar en la medida en que resulta una imposición de la Directiva , que en su artículo 16 determina que su harmonización es plena, de modo que –salvo en los aspectos excepcionales que contempla- los Estados miembros no pueden mantener o introducir disposiciones distintas de las establecidas en la propia Directiva.